Nave de Papel. Miércoles 27 de agosto de 2007. Año III. No. 306. San Luís de la Paz, Gto.

La Canción necesaria
Jesús Zarazúa Rangel

"...Y fui llenando con flores a mi fusil de poemas y afiné la puntería del canto contra las bestias. Fui sumando corazones para vencer madrigueras al llenarme los rumores del volantín cuando vuela. Yo amarré los recuerdos al árbol de la noche y fui en busca del sol..."
Ali Primera

Desde siempre el canto ha sido necesario para expresar emociones y sentimientos. Luego surgió la canción comercial, pero desde antes ha existido la canción necesaria (la canción de protesta) y con ello damos vestigio que pertenecemos a un pueblo que lucha día a día sin dejar de insistir en lo único indispensable para el hombre, la vida.
La palabra en la canción sólo tiene tres funciones fundamentales dar muestra de amor, de fiesta y hondar en la muerte; rasgos característicos de un ser vivo.
Siempre me ha gustado el rock rupestre y urbano (grupos que van desde el Tri, el Haragan, la Banda Bostik, Liránroll, Rockdrigo González, Rafael Catana, Arturo Meza, etc.), la música tradicional y la trova (géneros que van desde el canto nuevo, el huapango, el son veracruzano entre otros muchos). En estas distintas manifestaciones de la palabra he encontrado la canción libertaria y de protesta, las palabras contestarías con las cuales he ido haciendo conciencia del mundo y todos sus accidentes, casualidades y coincidencias.

El canto desde hace muchos años es una manifestación humana llena de colorido y sabor, la música para poder ejecutarse debe sentirse y experimentar en el cantor una sensación de plenitud que le permita transmitir a través de ella las emociones en torno a la vida y que comprende los tres aspectos que les comentaba unas líneas arriba: el amor, la fiesta y la muerte, de reunir estas características, la canción toma vida en si misma y es un vestigio autentico del sentimiento que pretende transmitir. En la antigüedad, la tradición oral estaba llena de cantos epopéyicos, con los cuales se transmitía de una generación a otra toda la historia de un pueblo, sus hazañas y sus pensamientos.
En especial en este texto quiero resaltar la importancia de la canción de protesta o como es conocida por algunos, la canción necesaria y se dice que es necesaria porque en ella encontramos la voz del mismo pueblo, es la misma sociedad la que a través de diversos cantantes en diferentes géneros se hace escuchar cuando parece que el mismo sistema nos tiene más callados y sometidos, en toda Latinoamérica se ha coincido y esa convergencia de sentimientos y emociones surgidas de nuestras condiciones en las que vivimos han hecho que el canto sea un corazón vivo que late y que bombea sangre caliente para dar vida a los que han caído, es así, como en todos los países ha surgido la canción contestaría que ha molestado a muchos gobernantes pero que ha dado respiro a miles de gentes de las clases más bajas y que se han identificado con las letras de las canciones que en su mayoría tienen un alto contenido poético y el escucharla nos da un instante de libertad, que es lo que se busca y por lo que se lucha, por la libertad.
Si analizáramos algunos versos de las canciones encontraríamos que se van dibujando imágenes de la gente común en su devenir diario, el poeta-trovador es un individuo salido de la misma gente por eso contribuye a alivianar el dolor del pueblo con su canto, él también alivia sus penas, por ejemplo en los versos que hace el venezolano Ali Primera en su canción “Humanidad” nos dice “Pobre de el niñito campesino/ que aún siendo niño / tiene que ser hombre para trabajar / que aún siendo niño / tiene que ser hombre para trabajar. Es una imagen que se registra a diario en los países latinoamericanos y que con cierto dolor se transforma en una cotidianidad y los gobernantes simplemente se niegan a darse cuenta que esto sucede en nuestras poblaciones campesinas (que se cuentan más que las urbanas) y siguen con sus administraciones sin lograr la trascendencia. Si ahora nos vamos a una imagen más urbana haremos referencia a los versos de la canción “70 centavos” del mexicano Arturo Meza que dice “16 de septiembre, no es una fecha de orgullo nacional / es una calle de mendigos / 70 centavos el kilo de soledad, de corrupción, de burocracia / de crimen y discriminación”. Encontramos el humor negro y vemos como se enlaza un fecha a la cual los mexicanos le rendimos culto y que por la importancia que ha alcanzado incluso algunas calles de diferentes poblaciones se les ha puesto ese nombre, pero aquí el autor de las lenguas viperinas, nos hace reflexionar e incluso nos pone un balde de agua fría en la espalada para que despertemos de nuestros laureles de libertad.

Para cada una de las situaciones que vivimos los hombres de carne y hueso, con problemas en el amor y principalmente con problemas económicos la canción necesaria brinda una imagen de consuelo, escupe un verso que no silencia, sino al contrario se levanta para tomar fuerza y protestar contra aquello que nos daña y que pretende acabar con nosotros como sociedad plena e identificada con sus raíces y su pasado. Cada vez van surgiendo nuevos cantautores pero todos ellos respetando a los que han estado primero ya que han llevado al contexto de la música el hueso de las personas y se ha convertido esa canción en una canción necesaria e indispensable para que las sociedades puedan mantener cierta paz con la contraparte burocrática que por sus altos sueldos tienen acceso a prácticamente todo cuando en las personas comunes a veces se alcanza para lo necesario y se adolece de lujos, es por eso que la canción de protesta, la encontramos en producciones independientes, en disqueras muy pequeñas y de corta distribución, creo que nunca veremos que un cantante o un grupo de éste tipo de canción alcance un disco de platino o diamante por las exageradas ventas y no porque no exista la calidad, sino porque, las ventas no se logran porque su producción y distribución es muy limitada ya que para la disqueras comerciales les es más negocio vender artistas de plástico con espacios televisivos y radiales que ofrecer al mercado calidad en lírica y conciencia que haga reflexionar a cada uno de los oyentes.
La canción necesaria es arma para el guerrillero social, para el combatiente en contra de las injusticias pero que sabe que más que tomar las armas, hay que tomar la palabra y alzarla, Alí Primera menciona en unos de sus versos “Los que mueren por la vida / no pueden llamarse muertos / y a partir de este momento / es prohibido llorarlos…” quienes luchan de esta manera con palabra y dignidad jamás mueren porque siguen vivos en sus palabras que son el reflejo directo de su pensamiento. En México no es la excepción y Por supuesto que también tenemos grandes manifestantes de la palabra a través del canto, la mayoría de estos guerreros surgen de la música tradicional de las diferentes regiones del país, encontramos los exponentes de los huapangos, de los planecos, de los sones arribeños y abajeños y una gran variedad de música endémica y que igual que en la mayor parte de Latinoamérica utilizan la décima espinela como estructura poética y aún más, encontramos que los poetas como se hacen llamar, son personas con habilidades impresionantes de improvisación, lo cual en sus presentaciones le da un sabor muy especial y que gusta mucho en los diferentes públicos y quizá, la razón del pregón basado en la juglaresca ha permitido que sigan vigentes y con la palabra más fuerte que nunca. Pero en el Distrito Federal desde hace algunas décadas ha surgido el canto nuevo y el rock urbano y rupestre que ha intentado dibujar en sus versos la vida de las clases bajas de la capital, y no se puede olvidar la lucha que han tenido estos géneros que han surgido en los vagones del metro y en las zonas más marginadas de la capital, son muchos los grupos que siguen luchando contra la cerrazón radial y televisiva e incluso con la de las disqueras que siguen buscando artistas de plástico que en sus letras y en su música no tienen ninguna propuesta, sino que, al contrario están diseñados para sobrevivir únicamente unos cuantos años, mientras que la canción de protesta seguirá viva porque cada nueva generación de jóvenes están en la búsqueda de un mejor nivel de vida y esta canción necesaria siempre será el vehiculo para esa búsqueda interminable. Fernando Delgadillo en una de sus canciones menciona “qué se ha dicho de la canción de protesta / que es un engaña muchachos…” muchos políticos así la quieren ver porque les incomoda que les dicen sus verdades o aún peor, quieren sobresalir como buenos gobernantes y lo único que han hecho es roerle las entrañas a la gente común, con el aumento de impuestos, con el congelamiento del salario mínimo que en verdad es miserable, sin brindar oportunidades de trabajo a los nuevos profesionistas y mucho menos a las personas que por alguna u otra razón se han quedado en el analfabetismo y todavía se sorprenden que seguimos en el último lugar en educación, pero si en verdad no se ha hecho nada por culturizar a los mexicanos, no existen apoyos ni fondos suficientes para personas que se dedican a el arte de hacer música, poesía, teatro, literatura, etc.
La canción necesaria, es en verdad muy necesaria, ojala y que reflexionáramos al ritmo de poder escuchar alguno de los exponentes que se desarrollan en estos ámbitos y que nos sirva un poquito esa reflexión para cambiar, comenzando por nosotros mismos, quizá es difícil pero no imposible, todos tenemos acceso a la música, entonces nosotros debemos decidir qué música escuchar.
“Trata de que tu palabra sea más importante que el silencio que interrumpes…”Nos comenta Atahualpa Yupanki en uno de los versos de sus canciones, por supuesto que en nuestras sociedades es más importante la palabra que tenemos cuando exigimos algo que nos pertenece y que nos es arrebatado, cuando se nos ha robado la libertad de expresión, la libertad de vivir y de ser, es ahí cuando no sólo interrumpe, sino, irrumpe en nuestra conciencia.